domingo, 24 de junio de 2012

Mantenerlo todo adentro: El Sobrepensamiento.

¿Cuántos pensamientos corren por tu cabeza antes de ir a la cama?

Tal cual como cuando intentas cerrar tus ojos para dormir, es como si nuestra mente decidiese que esa es la oportunidad perfecta para  pensar en la vida y por qué las cosas son como son.

Para hacerlo todo más difícil, estos pensamientos por lo general nos dejan a nosotros mismos preguntándonos, nos llevan a cuestionarnos a nosotros mismos, nuestras elecciones, y lo peor de todo, el cuestionamiento a las personas que significan mucho para nosotros.

Cuando nuestro cerebro finalmente nos permite dormir, nosotros generalmente nos quedamos en un estado de confusión y tristeza que realmente no se puede explicar. Creo que la mayoría de nosotros vamos a cometer el mismo error de mantener todo adentro.

Nosotros continuamos pensando demasiado sobre cada aspecto de nuestras vidas hasta que éste se acumula dentro de nosotros. Nuestros pensamientos se convierten en una prisión de la cual no podemos escapar, y en el proceso, le permitimos controlar nuestras vidas de un modo negativo.

 A medida que estos pensamientos y emociones se acumulan, nos convertimos en una bomba que hace tic-tac, que es impredecible en cuanto a cuando va a explotar. Nos convertimos en nuestros propios peores enemigos. El sobrepensamiento de todo hace que nosotros nos volvamos, poco a poco, locos y perdidos, más bien nos dan la claridad de que anhelemos.

Dime, ¿nada de eso te suena familiar? Si así lo es, toma una respiración profunda durante este momento. Porque la verdad es que a veces lo mejor que podemos hacer es relajarnos y ver a dónde nos llevará la vida. Terminarás por aprender como la vida es realmente imprevisible,  y como ninguna cantidad de planificación o pensamiento nos hará estar alguna vez totalmente preparados para ella.

Nunca podremos ser capaces de escapar del pensar demasiado en todo, pero al final del día, todos tenemos esa posibilidad de elegir si nos permitimos a nosotros mismos a ser víctimas de ella.

Esa elección para elergir el solamente subir a esta montaña rusa llamada vida, aclarar la mente y disfrutar del paseo.